martes, 24 de mayo de 2011

La aceptación y el dolor


Aceptar el momento presente es clave para la tranquilidad. Realmente efectivo en momentos de crisis. Realmente sanador en momentos bellos. Ocurre que nos resulta difícil en ambas ocasiones. En la primera porque nos resistimos profundamente a ello, queremos otra cosa. En la segunda porque empezamos a desviar energía hacia el apego… que dure, que no se vaya nunca este momento. Son dos formas de generar sufrimiento, las dos, caras de la misma moneda.
Si hablamos de momentos de crisis, como dice Mariano Alameda, que dirige el Centro Nagual, una cosa es el dolor, y otra lo que tú hagas con ese dolor. Esto último es lo que deriva en sufrimiento, porque ante el dolor, puedes montarte una peli de victimismo o de terror imaginando que todo va a peor, o quizás que todo te pasa a ti, puedes resistirte al momento presente, mirar hacia otro lado luchando continuamente por no volver la vista… y en cualquiera de los casos habrás convertido tu dolor en un fantasma. El problema con los fantasmas es que ni siquiera los puedes tocar. Procesar ese dolor será infinitamente más difícil.
Y resulta que los humanos poseemos una asombrosa capacidad de resiliencia, aunque nadie nos hable de ello en el cole. Es nuestra capacidad de gestionar dolor, enfrentar una crisis e incluso salir fortalecidos de ella. Pero la resiliencia pasa por la aceptación: del presente por un lado, y de nuestra propia capacidad de cambio por otro. Y se puede desarrollar. La gente de la Asociación Terapéutica Psikolausen, acostumbrada a tratar con duelos y pérdidas significativas, habla de la necesidad de comenzar el camino del autodescubrimiento, para saber qué tenemos ya y dónde necesitamos trabajar para fomentar dicha resiliencia.
Si aceptas que puedes cambiar, que el dolor ya duele bastante y no quieres añadirle sufrimiento, una herramienta que te puede enseñar a aceptar también el presente es, una vez más, el Yoga, el descubrimiento del Yo más allá del barullo mental, la unión con el medio en el ahora. La que hace que los fantasmas se evaporen. Porque el sufrimiento sólo existe fuera del presente, pero no existe otra cosa más que el presente. Tú decides dónde quieres vivir.
(Imagen: prozac1)

8 comentarios:

  1. Hola soy Noelia, yo tengo mi lucha interior y estoy luchando por sacar la cabeza del fango. Voy notando cambios tanto externos como internos. Ahora se ve el mundo de otra manera,o el mundo me ve a mi de otra manera, no lo sé, lo iré descubriendo poco a poco. Me encata tu blog cuando lo leo es como ver mi mundo interior, teletransportarme a otro sítio donde mi voz y de otros muchos no sea indiferente, la gente cambia y me doy cuenta de que el emboltorio que tenía con el tiempo se va y aprendo a ver el mundo desde otra perpectiva. Me encantaría saber que ha sido de tí , como te va y esas cosas que surjen en la vida. Te mando un besazo G de GRANDOTE, MUAKKKSSS!!!

    ResponderEliminar
  2. Si nos fijamos un poquito nos podemos dar cuenta de que en las situaciones más cotidianas no estamos centrados, estamos siempre pensando en lo que tenemos que hacer después o lo que nos pasó antes. Así que, en situaciones más importantes, más felices o más tristes nos resulta aún más difícil.
    ¡Bonita entrada y gracias por la mención!

    ResponderEliminar
  3. Hola Noelia! Me alegra verte por aquí y saber que estás ahí, haciendo tu camino :) Mucho ánimo. Muchas gracias por tus palabras. Ya estamos conectadas :) Un besote!

    ResponderEliminar
  4. Psikolausen: Muchas gracias a vosotras, cúanta razón tenéis, hay que cultivar el presente cuando es más sencillo para que no se te escape cuando es más complicado. Un abrazote!

    ResponderEliminar
  5. Creo que es importante darle espacio al dolor. Tiempo para sentir, para llorar, para notar cómo se ha partido el corazón. Es importante permanecer en ese presente para poder dar el siguiente paso. Procurarte un buen hombro al lado antes de salir corriendo haciendo como que no pasa nada...

    ResponderEliminar
  6. Tampoco montarse una peli a su alrededor. Si estás en presente, es lo que es. :) Gracias, May! Beso.

    ResponderEliminar
  7. Hola Almu, yo el tiempo q estuve en paro q fue de marzo 2011 a noviembre del mismo año, pensaba siempre en negativo, q no me iba a salir ningun trabajo, q esto va a peor y no va a mejorar, pero me salio y me va muy bien, dentro de nada me renuevan, pero he aprendido la leccion de q no hay q dejar un trabajo si no tienes otro seguro x muy mal q te vaya en ese. bss evitasummers

    ResponderEliminar
  8. Me alegro mucho de que lo de ahora vaya muy bien y de que lo hayas tomado todo como un aprendizaje. Creo que de aprender va todo :) Un besote, y muchas gracias por aportar tus comentarios!! :)

    ResponderEliminar

Licencia de Creative Commons
Danzando con el Universo by Almudena A. Muñoz is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivs 3.0 Unported License.
Based on a work at danzandoconeluniverso.blogspot.com.