viernes, 22 de julio de 2011

Vacaciones

Dicen los orientales que los occidentales enfermamos porque no sabemos dejar descansar a la mente. Cuán cierto es, y más hoy en día, con la saturación sensorial y mental a la que estamos expuestos de continuo. Y lo peor es que vamos asumiendo que ése es nuestro estado habitual, hasta que se convierte en lo “normal” para nosotros. Hasta que un día, te metes en una clase de Yoga, o te acercas a la montaña, o a alguna cala perdida en la costa, te relajas de verdad y te das cuenta de que no es cierto, que tu estado natural no es el que piensas, sino que es el de profunda armonía con tu entorno. Te das cuenta entonces de lo estresado que estabas, de lo anti-natural que es vivir sin un minuto para la contemplación.
La palabra Vacaciones viene del latín, “vacatio” = “tiempo de vaciamiento”. De “reseteo”. Como lo quieras llamar, pero tiempo para dejar descansar la mente. Porque la mente no descansa ni cuando dormimos. Se ocupa quizás de otros temas diferentes a los de la vigilia, pero no descansa. ¿Cómo darle entonces un respiro?
Siempre está la meditación, una de las costumbres diarias más sanas que puedes adquirir, y  también es estupendo aprovechar las vacaciones para hacer algo totalmente diferente, y siempre, para dedicar un tiempo a la contemplación en algún lugar natural –vale un parque-. Siéntate en contacto con la Tierra, como han hecho miles y miles de generaciones antes que tú. Y observa. Pero observa de verdad. Mira las hojas de los árboles, o las olas de mar, y reposa allí tu mente. Si se va, vuélvela a llevar a ellas. Contempla de verdad, sin enjuiciar, sin pensar, sólo mira, como si nunca hubieras mirado a los árboles, como si no supieses lo que es el mar. Verás cómo sin concepciones pasadas, lo que te rodea adquiere una belleza especial: el brillo del presente. Observa a los animales en sus quehaceres, o en su quietud. Al rato, te darás cuenta de la falta que te hacía.
Y no te olvides de apagar el móvil, el ordenador, la tele… al menos durante unos días… verás cómo se enciende tu percepción natural, cómo brota el bienestar de tu conexión con el entorno. Porque toda la tecnología del mundo sirve a tu mente, y tu mente te sirve a ti... pero si no la dejas descansar, entrarás en un estado de continua agitación de base, que con el tiempo considerarás normal, sin darte cuenta de que perdiste la referencia de lo que es encontrarse realmente bien. Date la oportunidad de recuperarla en vacaciones. Olvida todo ese mundo virtual, y las preocupaciones por lo que no sabes si ocurrirá. Quédate en la Tierra, toma contacto con ella de verdad, aquí, ahora… y verás cómo cada momento está increíblemente lleno de Vida… no te la pierdas.
Gracias por leerme. Feliz Verano J

8 comentarios:

  1. Bien, pero no es tan "facil" ir al parque, a la montaña o al mar y "simplemente" desconectar. Para lograrlo se necesita un entrenamiento o preparación previa (yoga, meditación,...), sino, lo más probable es que estemos pendientes de cualquier otro asunto, angustiados porque se nos acaban las vacaciones y pronto deberemos volver al trabajo y al estres de todos los días...

    ResponderEliminar
  2. Germán, qué guay leerte! Todo entrenamiento es bueno, claro, pero no hay que olvidar que la capacidad de conectar con la Tierra nos pertenece, es innata ;) Muchas gracias!! Feliz veranito!! :)

    ResponderEliminar
  3. Pues si!!
    Los primeros días de vacaciones cuesta mucho bajar el nivel!!! pero merece la pena no caer en la trampa de seguir haciendo también en vacaciones!!!
    Gracias por escribirnos!! es un placer leerte!!
    Besikos y fleices vacaciones!!

    ResponderEliminar
  4. Lo mismo digo, guapa!! más besikos para ti. Disfruta mucho.. aquí y ahora ;) Y gracias por estar ahí siempre :)

    ResponderEliminar
  5. Hola hermosa muy lindo tu articulo, de vez en cuando es muy sano desconectarnos de los medios electrónicos, y conectarnos mas con nuestra madre tierra que aunque suena difícil si no tratamos nunca tendremos esa conexión que se requiere con el planeta y la naturaleza tan solo hoy es un día nublado en Mazatlan donde tienes tu casa desde luego, y estaba haciendo un aire tan rico que decidí tomar una silla y sentarme a disfrutar de lo hermoso que se miraba al lado de mi pequeña hija poco nos duro el gusto por que comenzó a llover y tuvimos que meternos pero lo que nos duro, lo disfrutamos, el ruido de las hojas corriendo al viento ummm fabuloso¡¡¡¡¡¡¡ saludos ¡¡¡¡¡¡

    ResponderEliminar
  6. Claudette, muchísimas gracias por tu amable y bonito comentario :) Siempre hay alguna oportunidad de disfrutar de la belleza que nos rodea, da igual lo que dure ;) Un besote enorme!

    ResponderEliminar
  7. El verano es la mejor epoca del año, al menos para mi, es cuando mas tranquila y alegre estoy, ahora no sabes donde ir xq se hace pronto de noche y por que hace frio, ahora me estreso más, me deprimo mas, yo siempre estoy pensando y le doi muchas vueltas a las cosas, tambien a las que queda mucho tiempo para que pasen, pienso mucho en el futuro. En el verano me es mas facil relajarme, disfruto mucho de la piscina y de las vacaciones. bss Almu. evitasummers

    ResponderEliminar
  8. Claro, el verano invita mucho a estar fuera, a la extroversión y compartir el ahora. Tenemos que aprender a apreciar también los momentos tranquilos del invierno, no perder demasiado el contacto con la naturaleza, aprovechar las horas de luz y las bonitas puestas de sol.

    Un besote, Evita, y muchas gracias por aportar tu experiencia :)

    ResponderEliminar

Licencia de Creative Commons
Danzando con el Universo by Almudena A. Muñoz is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivs 3.0 Unported License.
Based on a work at danzandoconeluniverso.blogspot.com.